Mujer Valiente 3

Hemos visto 2 características de las Mujeres Valientes.

La primera fue que una Mujer Valiente es una Mujer de Carácter.

La segunda, que una Mujer Valiente es Decidida...

Ahora veamos la tercera y última de este pequeño mensaje.

Una Mujer Valiente es:

3.- Humilde.

Estamos rodeadas de personas altaneras, rodeadas de mujeres que se desgastan tratando de mostrar un aspecto de grandeza.

Leí esto el día de ayer: "Qué poco posee quien se esfuerza por mostrar más de lo que tiene".

Suena pesado pero por experiencia en una etapa de mi vida pasada puedo asegurarte de que así es.

Humildad reclama Valentía. Sí, vuelve a leer: "Humildad reclama Valentía". Conozco a una Mujer con tremenda inteligencia, su capacidad de visión va más allá de lo que tiene frente a ella. Su esposo en cambio no es tan audaz, pero ella no sobresale, se queda justo al lado de su esposo, incluso detrás de él. Siempre está apoyando con argumentos veraces que él pronuncia dada la circunstancia. Y él la alaba, le da su lugar, le grita sus virtudes y la trata como lo que es: Coheredera de Cristo.

Esta clase de Mujeres son fuertes, con convicción, plenas en su interior. No tienen miedo a verse menos puesto que está consciente de quién es ella en realidad. La hija del Todopoderoso.

Es grato convivir con ésta Mujer pues siempre se mantiene quieta, no se sobresalta, no se perturba a vista de los demás. Siempre está dispuesta a echar mano de la ayuda, siempre atenta a las palabras que salen de su boca y siempre se hace de menos, asegurando que ella no está por encima de otros.

Esto en realidad la hace grande ante los ojos de Dios y siempre, siempre halla gracia ante los demás.

Abigail de gran ejemplo, ¿te acuerdas cuando estuvo frente a David? ¿Qué postura tomó? ¿Qué palabras le dijo? Imagina la escena y agrega una voz suave y delicada.

-Y cuando Abigail vio a David, se bajó prontamente del asno, y postrándose sobre su rostro delante de David, se inclinó a tierra; y se echó a sus pies, y dijo: Señor mío, sobre mí sea el pecado; mas te ruego que permitas que tu sierva hable a tus oídos, y escucha las palabras de tu sierva.

1 Samuel 25:23-24

¿Ves? ¿Te das cuenta de la gran mujer que fue Abigail? Luchemos para ser como ella!

Después pidió perdón por su ofensa... Pero si ella no hizo nada malo! Aún así pidió perdón.

1 Samuel 25:28

Recuerda: "Humildad reclama Valentía"

Por: Yessi Rendón